La visión de nuestros ojos es fundamental para nuestra vida diaria, sin embargo, cada día está expuesta a más riesgos asociados a la era moderna, el uso de pantallas y la exposición a los rayos del sol.
Debido a estos riesgos es muy importante que aprendamos sobre cómo podemos cuidar nuestros ojos, manteniendo una buena salud en todos los aspectos de nuestra vida.
En el siguiente artículo te contamos todo lo que necesitas saber sobre cómo cuidar la visión:
Cómo cuidar nuestros ojos
Cuidar la visión es algo que todos deberíamos hacer permanentemente. Independiente de si utilizas lentes o si consideras que tienes una excelente visión, tu visión puede ir deteriorándose con el tiempo o accidentes, por lo que es crucial mantener un constante cuidado en tus ojos.
Existen distintas recomendaciones y consejos que puedes empezar a aplicar para cuidar tu visión en el día a día:
Consejos para saber cómo cuidar la visión en el día a día
Si bien existen diversos factores de riesgo que pueden perjudicar tu visión, también existen diversas formas para cuidar tus ojos. Te compartimos algunos consejos sobre cómo cuidar tu visión:
1. Los lentes de sol son tus aliados
No decimos esto porque beneficiarán tu look o porque puedan ser un excelente accesorio, lo mencionamos por la protección que te pueden entregar.
Unos lentes de sol de buena calidad te protegen contra la exposición prolongada a los rayos ultravioleta, lo que resguarda a tus ojos de posibles daños que pueden recibir.
Es importante que, al momento de comprar lentes de sol, elijas los correctos considerando las recomendaciones de seguridad, como que sean certificados que entregan un 100% de protección ante rayos UV.
2. Cuídate de las pantallas
La recomendación principal es a evitar pasar tiempo excesivo frente a pantallas. Sin embargo, si eres alguien que trabaja con tecnología y no puede evitar estar casi toda una jornada laboral frente a un computador, aun así, existen formas de cuidarte.
Trata de realizar descansos de tu exposición a pantallas, una forma de hacerlo es con la regla 20-20-20, diseñada especialmente para el cuidado de la vista de quienes pasan mucho tiempo frente a una pantalla.
Consiste en que cada 20 minutos frente al monitor, pases 20 segundos mirando algo que esté al menos a 20 pies de distancia (unos 6 metros), con el fin de descansar la visión y cuidar tus ojos.
También considera mantener hidratados tus ojos, existen algunas gotas médicas que combaten el ojo seco que genera la exposición prolongada a pantallas.
3. Mantén un hábito de sueño saludable
Dormir es el momento donde tus ojos más pueden descansar y recuperarse del esfuerzo diario.
Un mal hábito de sueño está asociado a problemas a la vista como irritación ocular, conjuntivitis, fatiga ocular y fotofobia. Mantener un hábito de sueño saludable ayuda a que tus ojos se recuperen día a día, reduciendo la posibilidad de algunas enfermedades a la vista.
Si estás teniendo problemas para dormir bien, te recomendamos leer nuestro artículo: Todo lo que necesitas para mejorar tu hábito de sueño.
4. Revisa tus niveles de vitamina D
La vitamina D es uno de los muchos nutrientes esenciales para nuestro cuerpo, y tiene una estrecha relación con la salud de nuestros ojos.
La falta de esta vitamina puede acelerar la degeneración macular como también síndrome del ojo seco y uveítis. La forma más sencilla de obtener vitamina D es mediante la exposición responsable a la luz solar, aunque también la encuentras en algunos alimentos como el salmón, el atún y las espinacas.
5. Mantén una buena higiene en tus ojos
Los ojos son una parte particularmente sensible de tu cuerpo, por lo que hay que tener especial cuidado ante la posibilidad de infecciones.
Lo primero es que, si tienes contacto con alguna superficie que puede acumular muchas bacterias como sujetadores del transporte público o mascotas, te preocupes de lavar tus manos antes de tener contacto directo con tus ojos.
Por otra parte, también es importante que hagas una correcta higiene de tus ojos, algunas recomendaciones para hacerlo correctamente es utilizar algodón humedecido con agua tibia, como también usar productos aptos para el contacto con la cara.
6. Considera los factores de riesgo para tus ojos
Una parte muy importante del cuidado de tu visión es tener presente algunos factores de riesgo que pueden deteriorar diariamente tu visión:
Pantallas
Las pantallas, ya sea en su modalidad de teléfono móvil, computador o televisión, tienen un gran protagonismo en la actualidad. La media de las personas pasa más de 4 horas al día en una pantalla, y si hablamos de personas que trabajan con tecnología, este número sube a más de y horas diarias.
El gran tiempo que pasamos frente a ellas tiene efectos negativos en nuestra visión, genera síntomas como la visión borrosa, sensación de quemazón ocular, y síndrome de ojo seco.
La principal causa de la aparición de estos síntomas es la exposición directa a la luz de las pantallas, como también un exceso de fatiga visual, que se genera por el contacto directo con las pantallas y un excesivo esfuerzo de acomodación de visión.
Exposición al sol
Otro de los factores de riesgo, y uno al que estamos expuestos todos casi de la misma forma, son los rayos ultravioletas del sol. Si bien el sol nos entrega algunos beneficios como la entrega de vitamina D, también puede significar daños a la salud si nos exponemos de forma descuidada y en tiempos prolongados.
Lo más común es asociar el sol con daños en la piel, sin embargo, no es lo único que está en riesgo debido a la exposición a los rayos UV, nuestros ojos también pueden sufrir consecuencias negativas.
La exposición prolongada al sol aumenta el riesgo de enfermedades a la vista como cataratas, crecimiento anormal en el ojo, ceguera temporal e, incluso, cáncer ocular.
Trabajos riesgosos
Existen algunas personas que, por la naturaleza de sus trabajos, están más expuestos a daños oculares que el resto. Ya mencionamos a las personas que trabajan con tecnología y exposición prolongada a pantallas, pero estos no son los únicos trabajos con riesgo para su visión.
Por ejemplo, las personas que trabajan soldando están expuestas a un alto riesgo ocular, producto de la exposición directa a una fuerte fuente de luz, como también por las pequeñas piezas metálicas que pueden desprenderse durante sus labores. Para evitar riesgos, los soldadores deben utilizar elementos de seguridad especialmente diseñados para sus funciones.
Otros trabajos que están expuestos a riesgos para su visión son algunas personas que trabajan con fuertes químicos (por la posibilidad de accidentes y la emisión de gases), y trabajadores de albañilería o carpintería, quienes son más propensos a accidentes que comprometan su visión.
Si quieres saber más sobre seguridad en los espacios de trabajo y cómo prevenir accidentes, te invitamos a leer nuestra nota: 6 consejos para mejorar la seguridad laboral de tu pyme.
Enfermedades base
Debes saber que algunas enfermedades crónicas que, a priori no parecieran tener relación con tu vista, sí pueden tener efectos negativos en tus ojos. Tal es el caso de la diabetes y la hipertensión.
En el caso de la hipertensión, los problemas de flujo sanguíneo hacia tu retina te pueden provocar visión borrosa e incluso pérdida de visión si no es tratado en el largo plazo.
Por otra parte, la diabetes genera la enfermedad conocida como retinopatía diabética, que es la principal causa de ceguera en adultos en edad laboral. En esta enfermedad, los altos niveles de azúcar en la sangre dañan los vasos sanguíneos de la retina, lo que puede llevar a la pérdida total de la visión de uno o ambos ojos.
Enfermedades a los ojos y la visión más comunes
Si bien existen formas de cuidarte, aun así, puede ocurrir que desarrolles una enfermedad de la vista. Lo importante es que si pasa no se debe entrar en pánico, pues la gran mayoría tiene tratamientos y soluciones.
Te contamos sobre algunas de las enfermedades a la vista más comunes:
Miopía
La miopía es un problema de refracción dentro del ojo que provoca que los objetos lejanos se vean borrosos.
Ocurre cuando el ojo ocular crece demasiado, o bien cuando existe algún problema con la forma de la córnea o el cristalino del ojo. Cualquier persona puede sufrir de miopía, pero es más probable si alguno de tus familiares tiene esta condición pues tiene un componente genético en su origen.
Fuente: Clínica Baviera
La forma de diagnosticar la miopía es un examen de agudeza visual que es rápido e indoloro de realizar. Para tratarla, un especialista recomendará el uso de lentes con los ajustes que cada persona necesite según su grado de miopía.
Astigmatismo
El astigmatismo es un problema de visión que ocurre cuando la córnea o el cristalino del ojo no poseen una forma normal. Si estos elementos del ojo no son uniformemente rectos, los rayos de luz no se procesan de la forma correcta, generando visión borrosa.
Fuente: Clínica Baviera
Al igual que la miopía, se diagnostica con un examen de agudeza visual, y su tratamiento consiste en el uso de lentes.
Hipermetropía
La hipermetropía es una condición que ocurre cuando el ojo es un poco más corto de lo habitual o bien, la potencia del cristalino es menor que lo común.
Genera que la imagen se enfoque detrás de la retina y no directamente sobre ella, como ocurre normalmente. Su principal síntoma es generar que los objetos cercanos se van borrosos.
Fuente: Clínica Baviera
También se puede detectar con un examen de agudeza visual y, su principal tratamiento, es el uso de lentes.
Lo mejor es siempre consultar a un especialista
Con todo lo que hemos revisado podemos llegar a una rápida conclusión: la visión es un aspecto delicado de nuestra salud.
Con factores de riesgo que aumentan constantemente producto de factores como el uso de pantallas y una mayor exposición a los rayos UV, es cada vez más probable la generación de problemas a la vista.
Si crees estar experimentando algún síntoma de problema de visión, la mejor recomendación siempre es acudir donde un especialista que pueda diagnosticarte y entregar el tratamiento que necesitas.
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